El Área de Cultura del Ayuntamiento de Manzanares propuso a los escolares de Primero de Primaria la puesta en escena de la obra “La Noche” por Ultramarinos de Lucas. El codirector de la compañía, Juan Berzal, dijo que el montaje es ”una invitación a desprenderse de los miedos de la infancia para disfrutar de la oscuridad”.
A un niño llamado Marco no le gusta la noche, le da miedo la oscuridad por lo que permanece encerrado en su casa mientras los demás niños y niñas juegan fuera. Finalmente, Marco sale a jugar con los demás, afuera, en la noche. Todo cambia cuando un día recibe la visita de la Luna que le conducirá de la mano para conocer la noche y todos los seres que la habitan como los grillos, los búhos y las ranas, y ya nunca más le asustarán con sus sonidos.
Así parte la historia que propuso el Área de Cultura del Ayuntamiento de Manzanares con la representación de la obra “La Noche” por Ultramarinos de Lucas, a la que acudieron los niños y niñas de Primero de Primaria de los colegios de la localidad.
Según Juan López Berzal, coodirector de la compañía alcarreña, “La Noche” es una propuesta escénica para niños y niñas a partir de cuatro años, inspirada en el libro “Encender la noche”de Ray Bradbury. En ella, sus personajes narran pequeñas historias de sus vidas y hablan de su relación con el mundo desde la visión de la infancia.
Los actores, Marta Hurtado y Luis Orna, en los papeles de Marco y Luna, cuentan pequeñas historias. Luna muestra a Marco que la noche también tiene sus luces, sus sonidos y un mundo maravilloso, con el objetivo de quitarle el miedo a la oscuridad.
López Berzal señaló que el montaje “La Noche” es una interpretación sobre el miedo, que amenaza a los niños y mayores. Dijo que la compañía alcarreña ha investigado sobre ellos, añadiendo que en su puesta en escena también se habla de aquellas personas que, a lo largo de nuestras vidas, nos abren a lo desconocido y “nos muestran algo que por perjuicio , miedo o ignorancia no aceptamos. Alguien en un momento dado nos presenta la realidad y nos hace abrirnos a ella”, puntualiza.
El codirector de la compañía señaló que Ultramarinos de Lucas trabaja la interpretación desde la sutileza, “sin grandes efectos”. Desde su estreno, todas las representaciones han contado con una excelente respuesta de público y de crítica.
Preguntado por la importancia de que los pequeños vayan al teatro, López Berzal resaltó que lo esencial, “no es que los niños y niñas se conviertan en un futuro en público, sino que vivan el presente asistiendo a representaciones”.
Ultramarinos de Lucas se forma en Guadalajara en 1994, por un grupo de profesionales de las artes escénicas formados en escuelas como las de Jacques Lecoq, en París, el Teatro de la Abadía, la Escuela de Movimiento de Marta Schinca, o María del Mar Navarro, en Madrid. Sus miembros de la Compañía han trabajado con diversos grupos profesionales como Teatro de la Abadía, Zascandil, Matarile Teatro, Teatro del Olivar (María Ruiz), o Fuegos Fatuos.
Desde su existencia Ultramarinos de Lucas se ha consolidado como un núcleo estable de trabajo, realizando espectáculos tanto para público adulto como infantil y juvenil, en el que el cuidado por la calidad artística se ha convertido en carta de presentación como así lo ha reconocido la crítica y el público.
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