viernes, 29 de julio de 2011

Celia Crespo conmemora el 5º centenario del nacimiento de Orellana en la Ruta Quetzal


Celia Crespo, que ha sido monitora de la Ruta Quetzal 2011 define la aventura como “gratificante e inolvidable”. Licenciada en Ciencias de la Actividad Física y Deporte ha estado al frente de dieciocho jóvenes expedicionarias, que han conocido la selva amazónica de Perú, las riquezas culturales de Portugal y diferentes regiones de España, conmemorando el Quinto Centenario del nacimiento del explorador Francisco de Orellana.

Tras disfrutar de treinta y cinco días intensos llenos de aventura e interculturalidad, la joven Celia Crespo ya se encuentra en Manzanares. Como monitora de la Ruta Quetzal 2011, viajó el 16 de junio a Perú, para conocer la cultura Moche. La segunda semana, teniendo a su cargo a dieciocho jóvenes expedicionarias con edades comprendidas entre los 15 y 16 años, recorrió la región amazónica.

Allí vivió una aventura impresionante, que le hizo conocer la fortaleza de Kuelap, que se encuentra a más de 3.000 metros de altitud, en mitad del Amazonas, y otras maravillas de la naturaleza, como la catarata Gotca y la comunidad indigena de Huancas.

Celia resalta de su aventura peruana que pudieron conocer al presidente de este país. Alan García presentó a los participantes de la Ruta Quetzal 2011 una mirada histórica del Perú. Resaltó, según la joven manzanareña, que es un país multicultural con su propia identidad y autonomía, intentando mejorar día a día su situación económica y social.

Así, la tercera semana de la Ruta Quetzal 2011 el destino fue España, recalando en Madrid. Tras la acampada en el Canal de Isabel II, subieron al Puerto del Reventón, en una jornada que supuso un gran esfuerzo para todos los expedicionarios.

También, visitaron el Parque Natural de Urbasa, Bilbao, Santander, varias poblaciones asturianas y A Coruña, para ir después desde Marín a Lisboa. Por último, visitaron la ciudad cacereña de Trujillo para conmemorar el V Centenario del nacimiento de Francisco de Orellana, finalizando la ruta el 20 de julio en Boadilla del Monte; Madrid.

La monitora de la Ruta Quetzal 2011 define la experiencia como “gratificante e inolvidable”. Afirma que con ella ha aprendido a valorar más “lo cotidiano de la vida”. Dijo que esta aventura también le ha servido para ampliar sus conocimientos y crear más valores, junto a 230 jóvenes expedicionarios de 53 países, veinte monitores y un equipo de profesionales, que ha estado coordinado por el archiconocido Miguel de la Quadra Salcedo.

Celia anima a los jóvenes de la localidad a participar en la Ruta Quetzal 2012 enviando sus trabajos para que sean seleccionados.

Para finalizar, nuestra aventurera asegura que los llantos y lágrimas de despedida fueron protagonistas en la última jornada y asevera: -“Todo lo vivido ha merecido la pena”.

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