Los niños y niñas del CAI Municipal de Manzanares se disfrazaron de pingüinos para participar en un desayuno especial organizado en la mañana del martes con motivo del carnaval. La actividad tiene como objetivos fomentar la afición por el carnaval y que los niños pierdan el miedo a las máscaras.
Aunque en estos días todos los centros educativos de Manzanares permanecen cerrados y los escolares disfrutan de unas cortas vacaciones con motivo de las fiestas de Carnaval, el CAI Municipal mantiene sus aulas abiertas para atender a los más pequeños de la casa, alrededor de un centenar de niños y niñas de 0 a 3 años.
Sin embargo, en la mañana del martes de carnaval la dirección y el equipo de educadores del centro infantil manzanareño programaron un desayuno especial, compuesto por bizcochos y leche con cacao, al que todos los pequeños asistieron disfrazados de pingüinos. La música y los juegos también formaron parte de la fiesta carnavalera que se desarrolló en el CAI y que propició la celebración de una jornada divertida y diferente.
Según explicó la directora del centro infantil manzanareño, Mª del Espino Espinar, la actividad se organiza con el objetivo de fomentar entre los niños la afición por el carnaval y conseguir que pierdan el miedo a las máscaras y que sean capaces de aceptarlas como parte de la fiesta. Así mismo, se pretende que sean protagonistas y se diviertan disfrazándose.
Las monitoras también se disfrazaron y disfrutaron de la fiesta al mismo tiempo que los pequeños que, una vez que terminó la celebración, volvieron a sus aulas para seguir desarrollando la actividad cotidiana.
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