El Aula Médica “Emiliano García Roldán” del Hospital “Virgen de Altagracia” de Manzanares acogió durante esta semana un curso de Electrocardiografía Clínica para enfermería, organizado por el Colegio de Enfermería de Ciudad Real. Este curso fue impartido por un equipo de profesionales de la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital General de la capital de la provincia.
El curso de Electrocardiografía Clínica, realizado en el Hospital Virgen de Altagracia, tiene una duración de veinticinco horas y está siendo impartido por personal con gran experiencia en la realización de este tipo de actividades formativas, pues en los últimos años han tenido oportunidad de actualizar los conocimientos en esta materia a más de cuatrocientos profesionales de enfermería de toda la provincia de Ciudad Real.
Al finalizar este curso, los alumnos podrán interpretar con corrección un electrocardiograma, mejorando así la calidad y fiabilidad de sus cuidados, conociendo las bases electro-fisiológicas del funcionamiento del corazón.
El electrocardiograma o ECG es una de las pruebas que se utilizan para valorar enfermedades cardiacas a los pacientes. Es la interpretación grafica de la actividad eléctrica del corazón, forma parte de un todo y como tal debe ser tenido en cuenta. La información que aporta debe adaptarse al objetivo que persigue de proporcionar un diagnóstico fiable del paciente. Por todo ello, el curso de electrocardiografía clínica enseña a realizar una lectura sistemática que permita integrar el ECG en la historia del paciente y sus síntomas.
El electrocardiograma es una prueba diagnóstica con más de cien años de antigüedad, muy eficaz, no invasiva ni dolorosa, que aporta gran cantidad de información y que en la actualidad no ha sido desplazada por otras pruebas más costosas y complejas.
El coordinador del curso, Santiago García Velasco Sánchez Morago, explica que las bases de entender un idioma, en este caso el del corazón, se adquieren con unas clases teóricas, pero para poder entenderlo y hablarlo correctamente es necesario practicarlo. Por ello, casi la mitad del curso es práctico, revisando ECG tomados de la práctica profesional diaria, siendo evaluados por el propio alumno con el asesoramiento de los docentes. La parte teórica revisa el electrocardiograma normal, los posibles errores a la hora de hacer e interpretar un ECG, las alteraciones mas frecuentes, como arritmias, bloqueos o síndromes coronarios, y la sistemática de interpretación de los trazados.
Su objetivo es actualizar y ampliar los conocimientos teórico-prácticos sobre la realización de electrocardiogramas de los profesionales de enfermería que prestan sus servicios en este centro sanitario. Pero el curso también se dirige a otros ámbitos de atención sanitaria como la atención primaria. Según Santiago García Velasco, “hay que considerar que un paciente puede tener una patología cardiaca en cualquier lugar, como Atención Primaria que es la puerta de acceso al sistema, por lo que los profesionales que trabajan en esta área de atención también deben estar adecuadamente formados en la realización de estas técnicas y su correcta interpretación”.
Para el vocal de docencia y formación continuada, Antonio Espinar Valle, este curso representa para los alumnos una gran oportunidad de obtener conocimientos especializados sobre arritmias y sus tratamientos, incluidas las arritmias más graves como la fibrilación ventricular, haciendo especial hincapié en el síndrome coronario agudo y la cardiopatía isquémica, “una de las principales causas de mortalidad no traumática en los países civilizados”.
El interés por la electrocardiografía ha ido en aumento, tanto en el ámbito hospitalario en donde es práctica habitual solicitarle a un paciente la realización de un electrocardiograma, puesto que es una exploración rutinaria y no agresiva, y cuya información permite correlacionar sus alteraciones básicas más significativas, como en el extra hospitalario, en donde su importancia es mayor al carecer de otros medios diagnósticos.
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